Las primeras semanas después del parto pueden estar llenas de experiencias nuevas, tanto para la mamá como para el bebé. Y uno de los mayores retos de aprendizaje que podrías encontrar es la lactancia materna.
Esta etapa (conocida como el cuarto trimestre) puede generar una amplia gama de emociones. Además, aprender una nueva habilidad como la lactancia materna puede ser más difícil de lo que imaginas.
Charlamos con Amber Gibson, fundadora de Body, Birth & Baby (una práctica holística de partería privada) y consultora de lactancia y partera registrada con más de 8 años de experiencia.
En este blog, exploramos qué esperar durante el cuarto trimestre, cómo prepararse para la lactancia materna y los beneficios del masaje mamario durante las primeras semanas posteriores al parto.
¿Qué es el cuarto trimestre?
Durante el embarazo, experimentamos tres trimestres en los que nuestro cuerpo evoluciona y cambia a medida que traemos una nueva vida al mundo. Una vez que nace el bebé, esas primeras 12 semanas con el recién nacido se conocen como el cuarto trimestre .
El término fue acuñado en 2002 por el pediatra Dr. Harvey Karp, quien sugirió que este período debería utilizarse para recrear el tipo de entorno que nuestros bebés tuvieron en el útero.
Como explica Amber, «el cuarto trimestre es el momento ideal para que el bebé esté cerca de sus padres. Quiere estar en el pecho de sus padres, sentir sus latidos y alimentarse con mucha frecuencia».
El objetivo es brindarles a los bebés un entorno suave, enriquecedor y de apoyo durante las primeras semanas, que puede incluir:
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Envolver al bebé en una manta cuando lo acueste a dormir para que se sienta seguro y tranquilo, así como balancearlo o mecerlo suavemente mientras lo carga.
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Contacto piel con piel y abrazos a su recién nacido (esto es algo que tanto usted como su pareja pueden hacer).
- Alimentar con frecuencia (ya sea amamantando o con biberón) y reforzar ese contacto cercano y la comodidad.
Además de apoyar a tu recién nacido, el cuarto trimestre también es un momento para recuperarte y encontrar tu rutina como nueva mamá.
¿Qué desafíos pueden surgir durante la lactancia materna durante el cuarto trimestre?
El cuarto trimestre es un momento en el que se aprenden muchas habilidades y roles nuevos a la vez. Como comenta Amber, uno de los grandes retos que algunas podemos afrontar es la lactancia materna (si decides que es la opción adecuada para ti).
“A muchas mamás primerizas les resulta realmente difícil sentir que [la lactancia] habría sido algo fácil y natural, y a menudo ese no es el caso”, comparte Amber.
Desde comprender cómo se siente un buen apego hasta darse cuenta de la frecuencia con la que es necesario alimentar a los bebés (que puede ser cada hora o dos horas durante las primeras semanas ), puede haber mucho que aprender y absorber durante el cuarto trimestre.
Pueden ocurrir problemas comunes como congestión mamaria, conductos bloqueados e incluso mastitis (particularmente en las primeras semanas) y pueden causar mucho dolor y malestar para las nuevas mamás.
Amber recomienda que las mamás se tomen un tiempo para familiarizarse con sus pechos antes de amamantar a su bebé para comprender qué tan llenos pueden sentirse. Además, recomienda que las mujeres aprovechen el poder del masaje mamario (usando productos como la bola Lactamo ) para ayudar a estimular el flujo sanguíneo, favorecer el reflejo de bajada de la leche y favorecer un drenaje adecuado.
“Les digo a las mamás que se hagan masajes en los senos todos los días, especialmente durante el cuarto trimestre”, cuenta Amber.
Cómo prepararse para el cuarto trimestre
Lo más importante que Amber recomienda a las mamás que hagan para prepararse para el cuarto trimestre es esto: educarse a través de clases y recursos.
“Realmente creo que una clase de lactancia materna prenatal es absolutamente clave”, explica Amber.
También vale la pena hablar con tu partera, ya que es un gran recurso y puede orientarte hacia información de buena calidad sobre qué esperar durante el cuarto trimestre.
Amber también sugiere que las mamás piensen en crear un plan posparto que les ayude a determinar dónde obtendrán apoyo (por ejemplo, dónde encontrar un consultor de lactancia local ), qué comidas comerán (¡y tal vez incluso abastecerán el congelador!) y otras cosas como cuánto tiempo su pareja estará fuera del trabajo para apoyarlas.
"Creo que al tener este plan en marcha, incluso en aspectos como los límites para las visitas... puedes concentrarte en adaptarte a la vida posparto", cuenta Amber.
En caso de duda, consulte siempre a su profesional de la salud.