Comenzar su viaje de lactancia inmediatamente después de una cesárea puede ser desalentador, pero con la información y el apoyo adecuados, puede ayudarla a prepararse para el éxito.
Para este blog, hemos recurrido a Melissa Hays, de Cocoon and Cradle. Mel es madre de tres hijos, consultora de lactancia certificada internacionalmente, coach holística del sueño, enfermera pediátrica y matrona . Comparte un vasto conocimiento a través de su página de Instagram y sus directos gratuitos.
Impacto de la cesárea en la producción de leche
El inicio de la producción de leche se desencadena principalmente por los importantes cambios hormonales que ocurren cuando la placenta se separa del útero. Este proceso es el que le indica a tu cuerpo que es hora de empezar a producir leche, dice Mel. Algunas mamás podrían notar que una cesárea puede retrasar ligeramente este proceso, aunque las madres pueden esperar que la leche baje entre dos y seis días después del parto. Tu cuerpo seguirá produciendo calostro incluso si la leche tarda en bajar. "Si sientes que la leche baja más lentamente, asegúrate de buscar apoyo. Recuerda, ¡una IBCLC es tu mejor aliada para el pecho!"
Apoyo al suministro de leche después de una cesárea
Mel aconseja que iniciar la lactancia materna y mantener el contacto piel con piel lo antes posible después del parto es la mejor manera de amamantar. Normalmente, esto se puede facilitar en el quirófano después del nacimiento del bebé; sin embargo, si por alguna razón no es posible, es importante que se facilite lo antes posible. No se preocupe, puede estimular sus pechos con un suave masaje con Lactamo y la extracción manual hasta que pueda amamantar a su bebé.
Riesgo de congestión o retención de líquidos
Amamantar después de una cesárea presenta desafíos únicos, uno de los cuales es el mayor riesgo de congestión mamaria y retención de líquidos. Esta es una experiencia común para las madres que se han sometido a una cesárea, a menudo agravada por los medicamentos y líquidos intravenosos recibidos durante y después de la cirugía. Estas intervenciones médicas, si bien son necesarias para el procedimiento y la recuperación, pueden provocar una acumulación de líquidos en el cuerpo, incluyendo los senos. Esta acumulación de líquido puede causar que los senos se llenen excesivamente, se endurezcan y duelan, una condición conocida como congestión mamaria.
El exceso de líquidos en el cuerpo puede dificultar el flujo de leche, ya que ejerce una presión adicional sobre los conductos, lo que puede estrecharlos. Además, este exceso de líquidos puede endurecer el pezón y la areola, dificultando el agarre del bebé. Si esto ocurre, es importante abordar la congestión mamaria de forma proactiva y reactiva mediante masajes mamarios lo antes posible para minimizar su impacto en la lactancia.
Beneficios del masaje de senos
Según la Academia de Medicina de la Lactancia Materna (ABM), uno de los tratamientos que puede ayudar a reducir la congestión mamaria es el masaje mamario. Dos amplios estudios han demostrado que el masaje mamario reduce el dolor, la congestión y las molestias, informa Mel. Un masaje suave con Lactamo, dirigido hacia la axila, puede aliviar significativamente la hinchazón y la congestión, además de favorecer el drenaje linfático. Por otro lado, un masaje suave con Lactamo hacia el pezón antes y durante la lactancia puede estimular el reflejo de bajada de la leche y favorecer el flujo de leche.
Además, priorizar el autocuidado es esencial, no solo para la producción de leche, sino también para la recuperación posparto en general. Garantizar una nutrición adecuada y mantenerse hidratada es fundamental para este proceso.
Posiciones cómodas para amamantar
Mel aconseja que es importante encontrar una posición cómoda para amamantar. "Personalmente, creo que para las mamás con cesárea, una de las posiciones más cómodas para amamantar es la de lado". Esta posición no solo ofrece comodidad, sino que también alivia la presión sobre la herida de la cesárea. Esta posición te permite amamantar a tu bebé con mínima ayuda de otras personas para colocarte y colocarlo en la posición correcta.
Los mejores consejos de Mel para una lactancia materna exitosa después de una cesárea
- Establecer contacto piel con piel inmediato después del nacimiento.
- Inicie la lactancia materna dentro de la primera hora después del parto.
- Amamante con frecuencia, observando las señales de hambre de su bebé.
- A menos que sea médicamente necesario, evite la alimentación con fórmula para garantizar una lactancia materna frecuente y un suministro de leche adecuado.
- Busque apoyo profesional para la lactancia de manera temprana.
Preparación para la lactancia materna con cesárea programada
Mel sugiere que la expresión prenatal , o la extracción manual de calostro durante el embarazo, es un enfoque proactivo para ayudarla a prepararse para la lactancia.
También es muy recomendable consultar tempranamente con proveedores de atención médica y profesionales de la lactancia para recibir apoyo y orientación personalizados que ayuden a que la experiencia sea lo más manejable y gratificante posible.
¿Buscas más consejos sobre cómo prepararte para la lactancia y amamantar a tu recién nacido? Consulta estos artículos de Lactamo's the circle: