La mastitis es una complicación común de la lactancia, que afecta a aproximadamente el 25% de las mujeres en las primeras 26 semanas posparto. 1
Históricamente, la mastitis se ha considerado una patología que se presenta únicamente en la mama lactante2 , pero evidencia científica más reciente muestra que abarca una variedad de afecciones resultantes de la inflamación ductal y el edema del estroma.3
Los artículos publicados por el Dr. Douglas sobre la inflamación mamaria han provocado un cambio en nuestra comprensión de las causas de la mastitis y, por lo tanto, la necesidad de cambiar la evaluación y el tratamiento en el futuro. 4,5
El análisis de Douglas propuso un modelo mecanobiológico de la inflamación mamaria, en el que se hipotetiza la existencia de presiones intraalveolares e intraductales muy elevadas. Se propone que esta presión tensiona o rompe las uniones estrechas entre los lactocitos y las células epiteliales ductales, desencadenando cascadas inflamatorias y dilatación capilar. El aumento de la tensión estromal ejerce presión sobre los conductos galactóforos, lo que agrava la contrapresión intraluminal. El aumento del recuento de leucocitos y células epiteliales en la leche y las alteraciones del microbioma de la leche indican que el sistema inmunitario mamario está activando mecanismos para inhibir los ciclos de retroalimentación inflamatoria, lo que puede provocar dolor y edema, lo que a su vez puede agravar la presión ductal. 4,5
La clave para la prevención y el tratamiento de la inflamación mamaria es evitar presiones intraalveolares e intraductales excesivamente altas, lo que previene una masa crítica de tensión mecánica y la ruptura de las uniones estrechas entre los lactocitos y las células epiteliales ductales.
La presión en el sistema de conductos puede ocurrir por varios motivos:
- Congestión/edema
- Hiperlactación
- Estancamiento de la leche
- Características anatómicas subyacentes, por ejemplo, conductos sin salida, cirugía previa
- Compresión externa mediante ropa o masajes.
Protocolo ABM
El protocolo revisado de ABM ha generado un cambio en la forma en que debemos abordar y manejar la mastitis. Ahora es importante difundir la nueva información a las mujeres que la necesitan mediante el apoyo y la educación adecuados.
Masaje terapéutico mamario y drenaje linfático
Las directrices revisadas del protocolo introducen el masaje terapéutico mamario y el drenaje linfático como estrategias innovadoras para el manejo de las molestias relacionadas con la lactancia. Las directrices abogan por el masaje terapéutico mamario para facilitar el drenaje linfático y aliviar la congestión del tejido mamario, a la vez que desaconsejan el uso de masajes intensos de tejido profundo o dispositivos vibratorios que podrían causar daños. Si bien esto pone de manifiesto que algunos productos comerciales para la lactancia materna no son adecuados, resulta interesante observar cómo Lactamo se alinea directamente con el protocolo: Lactamo permite a las mujeres evitar el masaje de tejido profundo, a la vez que facilita el masaje mamario y el drenaje linfático, según lo recomendado por el protocolo.
A pesar de la creciente popularidad del masaje mamario y el drenaje linfático entre los profesionales de la salud, muchas mujeres manifiestan incertidumbre sobre la intensidad y la presión adecuadas para un masaje eficaz. Una vez más, los beneficios de Lactamo son evidentes: Lactamo facilita este proceso de forma sencilla, permitiendo a las madres abordar estos problemas de forma proactiva y reactiva con mayor facilidad y confianza.
Lactamo surge como una solución innovadora que se distingue de los dispositivos de masaje tradicionales al estar diseñado específicamente para el pecho lactante. Su diseño incorpora un centro gelatinoso que garantiza que la presión aplicada se mantenga dentro de los límites terapéuticos, minimizando el riesgo de daño microvascular. La composición única de Lactamo está diseñada para complementar las características mecánicas y elásticas del tejido mamario, que varían significativamente desde el tejido adiposo más blando a 0,5 kPa hasta el tejido cutáneo más firme a 3000 kPa. La suavidad exterior del dispositivo refleja el tacto suave pero eficaz que requiere el masaje terapéutico.
El protocolo también aborda el controvertido uso del calor en el masaje mamario, reconociendo que, si bien teóricamente podría exacerbar la inflamación, algunas mujeres podrían encontrarlo reconfortante. Lactamo se adapta a esta preferencia al permitir su uso a una temperatura agradable o a temperatura ambiente, lo que garantiza su versatilidad con fines terapéuticos. Además, Lactamo ofrece la ventaja de estar refrigerado, lo que no solo proporciona comodidad, sino que también ayuda a reducir la inflamación entre las tomas, lo que subraya aún más su utilidad e innovación en el apoyo a la lactancia.
Prevención y gestión
El protocolo ABM revisado analiza estrategias generales para el manejo de los trastornos del espectro de la mastitis, así como intervenciones específicas para cada afección. 3
Los principios generales se clasifican de la siguiente manera:

Para obtener recomendaciones específicas según la condición, consulte el protocolo completo.
Conocemos los beneficios del masaje terapéutico mamario y existen numerosas investigaciones que respaldan su uso en diversas afecciones relacionadas con la lactancia. Sin embargo, sin la capacitación, la orientación y las instrucciones adecuadas, las técnicas empleadas a menudo pueden ser más perjudiciales que beneficiosas. El uso de un masaje suave, con la combinación correcta de tres componentes esenciales (temperatura, movimiento y compresión), ha demostrado ser beneficioso en muchas afecciones, incluida la mastitis.
"Un tratamiento rápido y eficaz detendrá la progresión del espectro [de la mastitis]". 3
Este artículo fue escrito por Kate Barry, RN IBCLC
Referencias
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Wilson E, Woodd S, Benova L. Incidencia de la expresión de leche materna y factores asociados en mujeres del Reino Unido: Un estudio transversal. J Hum Lact. 2020;36(4):673-686.
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Kvist LJ. Hacia una aclaración del concepto de mastitis utilizado en estudios empíricos de inflamación mamaria durante la lactancia. J Hum Lact. Febrero de 2010;26(1):53-9. doi: 10.1177/0890334409349806. PMID: 19910519
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Mitchell KB, Johnson HM, Rodríguez JM, Eglash A, Scherzinger C, Zakarija-Grkovic I, Cash KW, Berens P, Miller B; Academia de Medicina de la Lactancia Materna. Protocolo Clínico n.° 36 de la Academia de Medicina de la Lactancia Materna: El Espectro de la Mastitis, Revisado en 2022. Breastfeed Med. Mayo de 2022;17(5):360-376. doi: 10.1089/bfm.2022.29207.kbm. Fe de erratas en: Breastfeed Med. Noviembre de 2022;17(11):977-978. doi: 10.1089/bfm.2022.29207.kbm.correx. PMID: 35576513.
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Douglas P. Replanteando la inflamación benigna de la mama lactante: Un modelo mecanobiológico. Womens Health (Londres). Ene.-Dic. 2022;18:17455065221075907. doi: 10.1177/17455065221075907. PMID: 35156466; PMCID: PMC8848036.