El líquido linfático, también conocido como linfa, es un líquido transparente que circula por el cuerpo, recogiendo desechos, exceso de líquido, bacterias y células no deseadas. El masaje de drenaje linfático es un tipo de masaje muy suave que se centra en el drenaje de los ganglios linfáticos y el movimiento de la linfa por el cuerpo, ayudando al cuerpo a eliminar toxinas y desechos.

Cuando la linfa fluye correctamente, puede aliviar la hinchazón y la inflamación. Esto es especialmente útil para tratar problemas comunes de la lactancia, como la congestión mamaria, la obstrucción de conductos y la mastitis, donde el exceso de líquido linfático puede acumularse en los senos, causando congestión y dificultando el flujo de leche. Al facilitar el drenaje de ese líquido, el drenaje linfático puede reducir la inflamación, despejar la congestión y reactivar el flujo de leche, todo ello con una mayor comodidad.

El masaje de drenaje linfático tiene increíbles beneficios para la lactancia materna: no solo puede ayudar a resolver estos problemas comunes, sino que al incorporar este masaje de manera proactiva en su rutina de cuidado mamario puede ayudar a evitar estos problemas en primer lugar y ayudar a respaldar el éxito general de la lactancia materna.